domingo, 17 de junio de 2007

Y más Tokyo!


Por la mañana me levantó el resplandor del sol, reflejado en las ondas del río. Por un momento ni me acordaba donde estaba, por qué estaba en una habitación con una vista al lado de un río, por qué oía esos ronquidos. Ah, los ronquidos. Estaba definitivamente en un hostal.

Prioridad del día, conseguir un lugar donde pasar la noche. Generalmente esa es la primera cosa que uno tiene en la cabeza cuando se levanta. Afortunadamente, logre conseguir uno por 4 noches más en Tokyo, a buen precio. Luego de cerrar el tema, me fui a caminar por ahí hacia Shinjuku, hasta llegar un supermercado a comer algo, y como siempre, probar sin saber que carajos pediste.

Shinjuku es la parte de la ciudad que más se acerca a lo que uno se imagina de la moderna, cosmopolita, megalopolis Tokyo. Miles de personas en cualquier calle, letreros interminables de neón, pantallas gigantes, japonesas disfrazadas, autos alucinantes, cruces peatonales enormes, todo una sobredosis para los sentidos.

De hecho, algo curioso que hay en Tokyo es que vas caminando, y en cualquier esquina te quieren regalar algo, promocionando cualquier producto. En particular, ese día en Shinjuku salí con botellas de té, snacks en paquete, pañuelos faciales, billeteras, gaseosas... en fin! Como no le hago fo a lo regalado, salí con mil cosas. Y más encima te agradecen por regalarte las vainas! Muy educados ala.

En Shinjuku existen tambien mil tiendas de departamentos. En un edificio cualquiera, el primer piso es de un restaurante de ramen, el segundo es para periféricos de Apple, el tercero es un strip-club, el cuarto es un lugar para coleccionistas de Hello-Kitty, y el último, una librería. Distrito de contrastes...

Luego, el parque Yoyogi queda a unos 40 minutos de caminada, pasando por más tiendas. El Yoyogi Koen, es hogar del templo Meiji-jingo, uno de los más lindos y tradicionales de Tokyo (me tocó boda japonesa y todo!), y de los torii de granito más grandes del mundo. Pero tambien es hogar de las chicas que en cualquier fin de semana, hacen cos-play de las maneras más imaginativas posibles.

Continuando con el paseo a pié, más al sur de Yoyogi está Shibuya, un distrito particularmente lleno de chicos y chicas súper a la moda. Unas pintas que ni uno se imagina. Y entonces, cae uno en cuenta que para hacer las futuristas ciudades y personajes de los más alocados animés e historias gibsonianas, no es necesario hacer mucho esfuerzo... está todo acá.

De vuelta a la estación, cerca de Shinjuku, queda Kabuki-cho, que es la zona roja, o zona de tolerancia más conocida de Tokyo. De día parece ser una zona llena de máquinas de Pachinko, y fotos de japonesas en practicamente todas las paredes. Pero cuando cae la noche, las cosas cambian. Los Yakuza van saliendo con sus tatuajes y trajes con saco, y las chicas con sus minifaldas te ofrecen sus "servicios profesionales"... un barrio del bajo fondo, pero que en teoría es más seguro que cualquier barrio promedio de latinoamérica.

Ya cansado en el hotel, me preparé mis ramen de costumbre, y mientras estaba revisando correo y tomandome un té, me topé con un español con ganas de desmadre, y bueno... Noche alucinante en Roppongi! Salimos a las 11pm, y llegue al hotel a eso de las 8am. Club hopping, japanese style!

1 comentario:

Anónimo dijo...

hola como estas?
oye sabras tu de algun hostal barato en shinjuku, es solo por unas noche tendras el dato de alguno?
gracias